Sinceridad y buena educación, no están reñidas, pero en muchos programas parece que derrochar mala educación se confunde con sinceridad.
Todos hemos escuchado eso de “Yo es que soy muy sincera, tía, y digo las cosas a la cara” y con esa supuesta sinceridad, con esa espontaneidad, se aprovecha para descalificar, insultar, humillar.
No es necesario ser tan sinceros. A veces, sin que nadie nos pregunte opinamos gratuitamente sobre lo mal que nos parece que va vestida una persona, cuando realmente solo se trata de una opinión personal.
📍 ¿Qué se pretende realmente?
📍¿Son celos, envidias...?
📍¿Tal vez solo se quiere desestabilizar al otro?
Este texto lo escribí en 2006 y hoy me encuentro este artículo que viene a decir lo mismo.
Destacó del artículo las siguientes frases:
👉.El exceso de sinceridad puede reflejar problemas de autoestima
👉 Si en tu sinceridad puedes herir a la otra persona sin aportarle ningún beneficio, ahórratelo. .
👉Hay personas que utilizan la expresión para expresar sus propias emociones o buscar un consenso ante un conflicto.
Así que, hoy de nuevo te animo a que te explores a ti misma y reconozcas tu poder.
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No necesitas que te quieran, necesitas quererte.
No necesitas que te valoren, necesitas valorarte.
No necesitas que te perdonen. necesitas perdonarte.
No necesitas ser aceptado. necesitas aceptarte.
No necesitas comprensión, necesitas comprenderte.
No necesitas que te valoren, necesitas valorarte.
No necesitas que te perdonen. necesitas perdonarte.
No necesitas ser aceptado. necesitas aceptarte.
No necesitas comprensión, necesitas comprenderte.
