Reiki es una modalidad de curación complementaria y basada en energía.
Tiene raíces antiguas, pero es especialmente adecuado para la práctica moderna de enfermería. El entrenamiento de Reiki ofrece una técnica precisa para aprovechar la energía curativa, o ki, y transmitirla a través del tacto. Los tratamientos de Reiki se equilibran suavemente y proporcionan energía que apoya el bienestar del receptor de una manera holística e individualista. Relajación, alivio del dolor, curación física, reducción de la angustia emocional, y una conciencia más profunda de la conexión espiritual son algunos de los beneficios atribuidos a Reiki en anécdotas, estudios de caso, e investigación exploratoria, como se resume en esta revisión de la literatura.
Reiki es fácilmente adaptable a la práctica de enfermería en una variedad de entornos, y puede proporcionar apoyo para los propios practicantes de Reiki, así como beneficiar a aquellos que tratan con Reiki.
Fuente: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/14639776/
Reiki y otras modalidades de energía se incluyen en el alcance de las normas de enfermería en muchos estados y podrían abordar problemas de estrés, fatiga por compasión y agotamiento. Las enfermeras son cada vez más vulnerables a estas condiciones; Reiki podría ayudarlos a curarse a sí mismos y ayudar a los demás.
Fuente: https://pubmed.ncbi.nlm.nih.gov/21140870/
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